INDICE ARTICOLO
Qué Es
El láser con anhídrido carbónico ( de CO2) es uno de los láseres más utilizados en el ámbito quirúrgico y dermatológico.
Los usos de esta tecnología son muy numerosos y van desde problemas dermatológicos (como verrugas, fibromas, condilomas, etc.) a la dermatología estética (como arrugas y manchas seniles).
Para Qué Sirve
El láser con CO2 es un láser ablativo, indicado para el tratamiento de numerosas patologías y condiciones dermatológicas:
- Angiomas
- Callosidad (sobre todo de la planta del pie)
- Queratosis seborreica de rostro, cuero cabelludo y torso (placas de color marrón, agrietadas, normalmente con relieve y similares a los lunares)
- Cicatrices (acné, varicela, cicatrices hipertróficas, queloides)
- Condilomas acuminados y gigantes (los llamados «cresta de gallo», que son una enfermedad de transmisión sexual muy frecuente)
- Épulis (bulto benigno de la encía)
- Fibromas péndulos (numerosos apéndices pequeños cutáneos situados en el cuello, axilas e ingles)
- Nevos (lunares) dérmicos y nevos papilomatosos (planos, elevados, moriformes)
- Pigmentaciones cutáneas (pecas, efélides, melasma, léntigos solares, léntigos seniles)
- Quistes sebáceos pequeños
- Rinofima (aumento del grosor de la piel y la dilatación de los poros en la punta de la nariz)
- Estrías
- Tatuajes oscuros
- Verrugas vulgares en cualquier parte del cuerpo
- Xantelasmas (acumulaciones de grasa de color amarillo en el párpado, típico en pacientes con altos niveles de colesterol en sangre).
Resurfacing de la Piel con Láser
El llamado resurfacing facial es un tratamiento que pretende eliminar o reducir determinadas expresiones del envejecimiento cutáneo, como arrugas o discromías.
Para obtener este resultado, el médico puede variar la «potencia» del haz del láser con CO2, obteniendo así dos resultados distintos:
- eliminar los estratos superficiales de la piel gracias a un haz de luz láser con gran intensidad;
- aumentar la penetración de la luz del láser para intervenir en la dermis.
Vaporizando las capas superficiales de la piel, el resurfacing con láser se hace de manera similar a una exfoliación profunda. De esta manera, suaviza la piel, elimina pequeñas manchas superficiales y estimula el rejuvenecimiento de la epidermis, haciendo que la piel esté más lisa y luminosa.
Sin embargo, el aumento de la temperatura en la dermis estimula la actividad de los fibroblastos con el aumento de síntesis de colágeno.
Además de una mejora de la consistencia y el aspecto general de la piel, el resurfacing de la piel con láser ayuda a atenuar las imperfecciones, como las arrugas, cicatrices, manchas solares, pigmentaciones seniles, poros dilatados y arrugas sutiles.
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Cómo Funciona
El láser con CO2 funciona emitiendo un rayo luminoso invisible, que entra dentro del rango de infrarrojos medio con una longitud de onda equivalente a 10 600 nm.
Gracias a esta característica, el objetivo biológico del láser con CO2 es el agua, que absorbe la energía del pulso del láser, evaporándolo instantáneamente.
El aumento resultante del volumen hace que la piel afectada, junto su tejido conectivo, células, membranas celulares y organelos intracelulares, sea retirada mediante fragmentación, evaporación y ablación.
Debido a que la piel contiene un porcentaje de agua muy elevado, esta característica hace que el láser con CO2 sea ideal para una ablación precisa y segura, con apenas daños en la piel circundante 1.
Por lo tanto, las ventajas del láser con CO2 con respecto al bisturí tradicional son diferentes: mayor precisión, menos hemorragias, menos respuesta inflamatoria y mejor cicatrización.
Láser CO2 Ultrapulsado
Los láseres con CO2 más recientes generan secuencias de impulsos de duración muy corta, separados por un intervalo proporcionalmente muy prolongado.
Cuando la duración del impulso del láser es más corta que el tiempo de propagación del calor en las capas que rodean la zona afectada, no se produce un daño térmico en los tejidos adyacentes y, por tanto, se limitan los efectos secundarios.
Entonces, el láser con CO2 ultrapulsado tiene la ventaja de minimizar la acumulación de calor en los tejidos adyacentes. Esto permite obtener una ablación muy selectiva, actuando con alta precisión en la profundidad deseada y minimizando el daño térmico.
Láser con CO2 fraccionado
El láser con CO2 tradicional no es un candidato ideal para el rejuvenecimiento cutáneo, ya que su uso en zonas relativamente extensas causa efectos secundarios relevantes.
Para resolver estas incidencias, se ha introducido la tecnología de fraccionamiento del rayo láser en una serie de microrrayos.
De esta manera, la luz del láser afecta solo a columnas de piel microscópicas, dejando entre ellas las zonas cilíndricas de piel perfectamente sanas.
Gracias a esta característica, el láser fraccionado permite una curación más rápida y reduce los efectos secundarios y, con ellos, el tiempo de reposo.
De hecho, de las zonas de piel sana parte un proceso de regeneración que permite una curación muy rápida, normalmente de 4 o 5 días.
Beneficios para el rejuvenecimiento
Los dispositivos modernos de láser con CO2 tienen la posibilidad de alcanzar una buena profundidad de penetración, incluso superior a 2 mm.
Las diferentes profundidades tienen indicaciones distintas; las superficiales dan buenos resultados para condiciones cutáneas muy superficiales, mientras que las profundas son, por ejemplo, útiles en la remodelación de cicatrices y en el rejuvenecimiento cutáneo.
Cuando el calor generado por el haz de luz láser afecta a los estratos más profundos de la piel, se observa:
- una retracción inmediata de las fibras de colágeno, lo que provoca una piel más tensada;
- un estímulo de la producción de nuevas fibras de colágeno por parte de los fibroblastos, que se activan para reparar el daño. Este efecto produce una regeneración global de los tejidos, con la consiguiente mejora de la estructura de la piel.
Resultados y su duración
Como hemos visto, los resultados del láser con CO2 dependen de las características de la imperfección y del tratamiento que el médico decide aplicar.
Generalmente, este láser ofrece resultados excelentes para la corrección de imperfecciones superficiales, como las arrugas sutiles y varios tipos de manchas en la piel.
Los defectos más profundos podrían mejorar solo parcialmente, siendo necesario repetir el tratamiento después de 3 a 6 meses.
Una vez resueltas, la mayor parte de las imperfecciones no vuelve a aparecer, por lo que los resultados se pueden considerar como definitivos.
¿Láser Completamente ablativo o Fraccionado?
Los resultados del láser con CO2 completamente ablativo son muy buenos. Generalmente, pueden ser mejores que los del láser fraccionado en los casos de mayor gravedad.
Por el contrario, el procedimiento requiere anestesia y sedación, imponiendo períodos de inactividad significativos (alrededor de 2 semanas).
De hecho, alrededor de 10 a 15 días tras la intervención, los pacientes pueden sentir molestias en las situaciones sociales, debido al eritema y las costras.
Además, al ser un láser sumamente agresivo, este tratamiento aumenta el riesgo de posibles secuelas no deseadas, como infecciones, cicatrices y lesiones por herpes simple.
Generalmente, con el láser con CO2 fraccionado, los resultados son muy parecidos a los del láser completamente ablativo, pero para igualarlos puede ser necesario repetir el tratamiento por segunda vez.
Aun así, muchos pacientes prefieren este método, gracias a los tiempos de inactividad mucho más breves, siendo de 2 o 3 días.
El láser con CO2 puede utilizarse de modo más o menos agresivo; la corrección se puede obtener con un solo tratamiento profundo o con varios tratamientos superficiales; la estrategia la establece el médico de acuerdo con las exigencias del paciente. Generalmente, cuanto más agresivo es el tratamiento, mejores son los resultados, pero los tiempos de curación son más largos en proporción.
Cómo se Realiza
Preparación
Antes de someterse a una sesión de láser con CO2, el médico puede recomendar varias intervenciones preparatorias.
Tomar fármacos para prevenir las complicaciones
El médico prescribirá un fármaco antiviral antes y después del tratamiento para prevenir la reactivación del herpes simple en los sujetos propensos.
En principio, no se aconseja tomar antibióticos por vía oral como medida preventiva.
Interrumpir la ingesta de algunos fármacos
El médico puede pedir la suspensión de la ingesta de ciertos fármacos como la aspirina durante la semana anterior a la intervención.
Evitar la exposición al sol sin protección
Una recomendación importante es la de evitar exponer la piel a la luz solar ultravioleta o artificial (lámparas de bronceado) en las 2 a 8 semanas anteriores al tratamiento.
De hecho, demasiado sol puede causar una pigmentación irregular permanente en las zonas tratadas y favorecer la reactivación del virus del herpes en algunas personas.
Por este motivo, normalmente los tratamientos con láser se realizan en las temporadas de otoño e invierno (de octubre a abril, según situaciones específicas).
Dejar de fumar
Los fumadores deberían tratar de dejarlo durante, al menos, dos semanas antes y después del tratamiento. Esto reduce el riesgo de complicaciones y ayuda a la piel a curarse mejor.
Aplicar determinados productos cosméticos
El médico podría recomendar, en las 2 a 4 semanas antes de la intervención, productos dermatológicos (p. ej. a base de retinoides) que, al reducir el exceso de sebo y volviendo más fino el estrato córneo, hacen que la piel esté más apta para reaccionar positivamente.
Probablemente el médico también recomendará el uso de protección solar de amplio espectro si no se puede evitar la exposición al sol.
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Durante el Tratamiento
Generalmente, el tratamiento de láser con CO2 se realiza como procedimiento ambulatorio.
La intervención puede realizarse con anestesia local con o sin sedación, que, en general, resulta necesaria en los procedimientos más invasivos.
Durante la sesión, el paciente tendrá una sensación de calor, escozor y picazón, molesta pero soportable.
Durante los impulsos del láser, se protegen los ojos con gafas especiales.
Al terminar la sesión, la piel se enfría con ayuda de bolsas de hielo, que favorecen el alivio de la hinchazón, la molestia y el picor.
La duración del tratamiento puede variar de 20 a 60 minutos según la zona a tratar.
También varía el precio, que puede ir desde los 200 a los 600 euros por sesión.
Aspecto de la Piel tras el Tratamiento
Tal como se recuerda, la agresividad del tratamiento depende del equipo que se usa y de la elección del médico.
Si se usa la tecnología del láser con CO2 fraccionado, se puede esperar la aparición de un edema (hinchazón) y del enrojecimiento cutáneo extendido por la zona tratada, como si estuviese afectada por una quemadura solar leve.
La piel puede permanecer ligeramente enrojecida durante 3 o 4 días. Mientras tanto, es importante hidratarla con cremas emolientes y calmantes adecuadas.
En el caso de usar la tecnología láser con CO2 completamente ablativa, en la zona tratada aparecerá una zona enrojecida (eritema) con una escara (costra).
Normalmente, las costras desaparecen a los 15 días, desprendiéndose de forma natural
Distintas variables condicionan el período de curación: además de la reactividad individual, esto depende de la zona tratada, de su extensión, del color de la piel, del lugar, del tipo de lesión y de la profundidad que alcanza el rayo láser.
Qué Hacer Tras el Tratamiento
En los primeros días después de la sesión, para aliviar el enrojecimiento e hinchazón, normalmente el médico prescribe una crema con propiedades antiinflamatorias.
En los días posteriores al tratamiento, el médico también puede prescribir una crema antibiótica (ej: gentamicina).
También es muy importante aplicar un fotoprotector adecuado durante las 6 semanas siguientes, con la ayuda de cremas solares de amplio espectro, sobre todo, en zonas expuestas al sol.
Además, se aconseja evitar el uso de perfumes o tónicos a base de alcohol y agua caliente en los días posteriores al tratamiento, evitando así lesiones de cualquier tipo en la zona tratada (incluso peeling y scrub).
Efectos Secundarios
Como cualquier otro tratamiento con láser, el CO2 también puede provocar algunos efectos secundarios.
Como hemos visto, entre los más comunes se encuentra un eritema transitorio (enrojecimiento), con dolor, picor, edema (hinchazón) y aparición de hematomas pequeños (moratones) y costras.
Además, existe la posibilidad de que en la zona tratada quede una pequeña cicatriz y/o marcas de hipopigmentación o hiperpigmentación.
El riesgo de discromías (oscurecimiento o aclaramiento de la piel) aumenta si la zona tratada no se protegió debidamente de los rayos solares antes y después del tratamiento, mientras que el riesgo de cicatrices e infecciones aumenta si se rascan las costras antes de la caída natural.
Contraindicaciones
Asimismo, las contraindicaciones del tratamiento con láser con CO2 pueden variar según el tipo de tratamiento. Entre las más comunes se encuentran:
- presencia de infecciones virales, bacterianas o fúngicas activas cerca de la zona a tratar;
- dermatitis en la zona del tratamiento;
- tendencia a desarrollar cicatrices hipertróficas o queloides;
- uso de fármacos fotosensibilizantes y anticoagulantes;
- piel oliva, mulata o negra, por el riesgo alto de alteraciones de la pigmentación;
- terapia antiacné con isotretinoína en los últimos meses;
- embarazo o lactancia;
- antecedentes de un largo tratamiento con corticoides;
- enfermedades autoinmunes y enfermedades del colágeno.